Museo de Troya en Çanakkale_concept design
2011, Turquía
El diseño de arquitectura del Museo de Troya de Çanakkale se ha llevado a cabo por el estudio de arquitectura RTA-Office, el cual ya viene siendo unos de los estudios habituales con varias publicaciones en nuestro blog Arquitectura-Arquidea.2011, Turquía
En este proyecto ha colaborado el estudio turco DOME Partners (Estambul).
El objetivo es que el edificio se levante en el área turca de Çanakkale pero aspire a ser una vocación global a través de su expresión, muestra de la cultura de una civilización. Un proyecto que actúe como motor generador de actividad social, de investigación y de cultura.
Tanto RTA-Office como Dome Partners coinciden en diseñar el edificio de tal
forma que genere un acontecimiento, que un polo de expresión cultural se
convierta en un reclamo internacional. Una pieza que catapulte un lugar con el fin
de revalorizarlo y reubicar en el plano global el inmenso valor que posee esta
civilización.
La estrategia consiste en el diseño de una pieza única, una joya, que por un lado sea complemento de las ruinas de Troya y por otro cree valor por sí misma. El punto de partida es recuperar con la mayor sensibilidad la magnificencia de esta civilización, capaz de crear en sus épocas de riqueza los objetos más bellos, llenos de esplendor y creatividad.
El Museo se alza en la naturaleza como una obra tallada delicadamente por manos artesanas. Una pieza que sobresale del terreno pero que a su vez respeta la dignidad del entorno natural. Sus trazos recuerdan la geometría de Troya, sus curvas tensas, los planos que las cortan e interseccionan de forma súbita, los encuentros entre cóncavo y convexo… El movimiento se plasma en las superficies del objeto donde se pueden descubrir algunas lecciones del artista Boccioni cuando ilustra la interacción de un objeto en movimiento con el espacio que lo
rodea, a través de la búsqueda intuitiva de una sola forma que crea un espacio continuo.
Lugar para la Experiencia.
Un espacio que permite desde un paseo introvertido hasta la actividad grupal. Un conjunto bien organizado que propone un sistema y multiplicidad en sus posibilidades y actividades. Un lugar que propone “vivir Troya” como una experiencia y no como algo meramente informativo.
Esta experiencia se inicia nada más llegar cuando tras aparcar el vehículo en el parking, lejos ya de la carretera principal, el transeúnte se dirige al edificio por un intencionado recorrido a través de un campo de olivos que proporciona sombras, frescura y texturas, y tras el cual se descubre el edifico.
Bajo un imponente umbráculo de madera se dispone el programa del edificio. En su interior un espacio de percepciones dinámico y cambiante, un lugar abierto sin obstáculos, prolongación de la naturaleza. Una gran plaza abierta al exterior como recibidor y distribuidor de actividad desde donde se accede a la zona de barbufett, “children play ground”. Justo al frente se encuentra la zona comercial y los servicios y al oeste la venta de entradas.
Tras este espacio de baja altura y de apariencia excavada para dar la sensación de entrar en un espacio arqueológico, se encuentra la zona de control y el acceso principal al Museo. Es aquí donde la percepción del espacio cambia radicalmente, se vuelve a estar bajo la verdadera magnitud de la gran cubierta del edificio y, en frente, aparece una rampa que siguiendo la topografía original del terreno conduce a las zonas de exposición. Al final aparece la zona de investigación arqueológica dispuesta en una superficie excavada en el terreno, justo tres metros por debajo del nivel de acceso al espacio de exposición permanente. De esta forma los visitantes pueden ver las piezas que se trabajan e investigan sobre el terreno.
El restaurante tiene una gran terraza exterior situada sobre una gran plataforma de agua y donde se reflejan los campos de olivos adyacentes y las zonas de recreación. Al final de la zona de exposición permanente y temporal y como final del recorrido se sitúa el auditorio y un bar. El foyer es el encargado de dar conexión a esos dos usos y posibilitar así la utilización del bar y el foyer en eventos, conferencias y congresos. Tras la visita al espacio museístico se desciende hacia el gran vestíbulo principal mediante unas espléndidas rampas.
Este edificio además tiene plena actividad diaria con las oficinas de gestión, los
comisarios y los investigadores que están situados en el ala oeste del edificio donde la topografía se eleva unos cuatro metros por encima de la zona de acceso al vestíbulo principal. Espacios interiores y exteriores continuos que buscan comunicar y transportar luz natural que penetra a través de la piel del edificio con el fin de propiciarle un ambiente agradable y confortable.
Creación de espacio.
La principal característica del Museo de Troya es la creación de espacio frente a la creación de forma. El resultado es un volumen único que se configura como un todo unitario. Un cuerpo elegante de líneas refinadas y sinuosas que se entrelaza, que envuelve y que se deja atravesar. Un edificio exclusivo, un “Gran Museo”, expresión de una época y de una gran visión de futuro.
Poética y tecnología en pro de la condición humana.
La fuerte expresión matérica se consigue por la utilización de un solo material, la madera, que se ha escogido especialmente tanto para la estructura como para la piel de este edificio por su elegante y sugerente textura, por su confort y porque pertenece a la naturaleza y al lugar. Además es el único material que provee al conjunto de cero emisiones de Co2.
Sostenibilidad y eficiencia energética
Una fusión entre la más alta tecnología de modelado y la construcción de espacio en tres dimensiones, el trato más delicado en la integración armónica con el paisaje y un fuerte compromiso en pro de la sostenibilidad, la eficiencia energética y el acondicionamiento del edificio.
El objetivo es que el edificio sea un lugar ambientalmente responsable, rentable y saludable para poder convivir y trabajar en él con calidad de vida. Para ello se han establecido sinergias entre disciplinas y tecnologías. La propuesta de RTA-Office y Dome Partners busca utilizar las mejores prácticas en la fase de proyecto y construcción para reducir significativamente o eliminar el impacto negativo del edificio en el ambiente y conseguir así el liderazgo en Diseño Energético & Medioambiental para que el edificio sea certificado “verde” LEEDTM por el Green Building Concil WORLDGBS New York. Un nuevo referente mundial en esta materia.
El propósito en cuanto a eficiencia energética del nuevo edificio es conseguir un
ahorro de alrededor de un 70% de energía y conseguir la máxima clasificación de
eficiencia energética “A”. Para ello, se basan en tres pilares fundamentales:
Economía, Sostenibilidad y Calidad de vida.
Planos del Museo:
Publicar entrada
Más información en: www-rta-office.com